MADRID (EUROPA PRESS).– El 80% de los cánceres de mama en hombres se detectan en estadios avanzados debido, por un lado, a la falta de visibilización, ya que hay mucha más concienciación del cáncer de mama en las mujeres; y, por otro lado, porque no existe el ‘screening’ de mama en hombres, advirtió la oncóloga médica del Hospital Universitario Ramón y Cajal, Noelia Martínez, miembro del Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama.
“No se piensa en este cáncer. Ese es el problema, y los diagnósticos tardíos influyen en el pronóstico de la enfermedad”, explicó Martínez, en el marco del encuentro ‘Invisibles 23’, el primer evento que se celebra en España dedicado exclusivamente al cáncer de mama en el varón, organizado por la Asociación de Pacientes con Cáncer de Mama Masculino (INVI).
Al igual que en la mujer, el cáncer de mama en hombres va creciendo poco a poco. “Tenemos pocos datos porque hay pocos registros, pero discretamente, anualmente la incidencia va aumentando, y llega al 1.5% del total de los cánceres de mama en España”, apuntó Martínez.
“Dentro de los 35 mil casos de cáncer de mama en este país, el 1% que ocupa el cáncer de mama masculino es un porcentaje pequeño, por lo que queda como una enfermedad rara”, lamentó Martínez, quien insistió en la importancia de “hablar de ello”.
La edad media de diagnóstico es a los 63 años, si bien Martínez advirtió de que “está bajando” y cada vez se detecta en pacientes más jóvenes. De hecho, la franja de edad varía entre los 29 y los 90 años. A diferencia de la mujer, en la que el subtipo más común es el HER2 positivo, en el hombre el subtipo más común de cáncer de mama es el luminal o con receptores de estrógenos positivos.
En cuanto a los factores de riesgo, durante la rueda de prensa se destacó que la genética “juega un papel fundamental”. Precisamente, entre el 15-20% tiene antecedentes familiares. Además, las hermanas o las hijas de los pacientes tienen de dos a tres veces más riesgo de padecer la enfermedad. En el caso de las mujeres, solo un 5% de estos tumores son por causa genética.
Más allá del genético, otros factores de riesgo de cáncer de mama en el hombre pueden ser: edad; alteraciones hormonales; exposición a radiaciones ionizantes; obesidad; Síndrome de Klinefelter, esto es, una afección genética que afecta a la producción de testosterona, y padecer enfermedades hepáticas como la cirrosis.
Síntomas y consecuencias del cáncer de mama en el varón
Los síntomas más frecuentes que pueden alertar de la aparición de un tumor de mama en hombres son: la aparición de un bulto indoloro en la mama, la ginecomastia (crecimiento de la mama); retraimiento del pezón o de la piel y secreción del pezón.
Por su parte, el presidente de INVI, Màrius Soler, también paciente, detalló algunas de las consecuencias de este cáncer, como su impacto en el ámbito sexual y reproductivo. “Se inhibe todo el tema sexual, y estamos hablando de que, cuando te diagnostican con 30 o 40 años, tienes toda la vida por delante”, expresó. “En estadio precoz, los pacientes podrán revertir la situación, pero en estadios metastásicos como el mío no se puede revertir”, lamentó.
De igual forma, la enfermedad también influye en la vida laboral de la persona, ya que “se detecta en edades en las que se está en plena efervescencia laboral”.
Asimismo, Soler puso el foco en el “estigma” de la enfermedad, porque “se asocia a la mujer”, y ha pedido más apoyo psicológico. “No lo comentamos, lo escondemos y ese es uno de los grandes problemas de este tipo de cáncer. Psicológicamente hay que incidir bastante y, por ello, la psicooncología tendría que arrancar desde el minuto cero, acompañando a los pacientes”, defendió.
Finalmente, también mencionó el dolor que afecta a los pacientes. “Es el punto número uno porque nos preocupa mucho, y aquí son fundamentales los paliativos”. En este punto, destacó que “paliativos no es igual a muerte, sino paliar los efectos secundarios relacionados con el dolor”.
Por otro lado, el presidente de la Asociación Española de Andrología, Medicina Sexual y Reproductiva (ASESA), el urólogo Ignacio Moncada, incidió en la falta de visibilización de esta enfermedad: “Los hombres nunca piensan que pueden tener un cáncer de mama, piensan que es una enfermedad de mujeres. Además, una vez se diagnostica, eso les lleva a pensar que están solos, y eso afecta mucho al impacto emocional”.
Como en el resto de los cánceres, “el diagnóstico precoz puede garantizar un tratamiento más efectivo”, recordó Moncada. “Las consecuencias del diagnóstico tardío son muy negativas: ya no lo podemos curar, porque, cuando ya hay metástasis, es muy difícilmente curable”, advirtió.
En definitiva, para el urólogo “hay que aumentar la concienciación en la población de que el cáncer de mama en el varón está ahí”. “Es poco frecuente, pero ocurre y con mayor frecuencia de la que cualquier hombre pueda pensar, por lo que hay que tener un índice de sospecha”, expuso.
Proyecto de investigación
El Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama impulsó el primer Registro Nacional de Cáncer de Mama en el Varón, que cuenta con datos clínicos y especímenes biológicos de alrededor de 800 pacientes y cuyo reclutamiento de pacientes finalizó este mismo viernes.
Este registro se acompaña del programa ‘ARDERNE’, un proyecto de investigación traslacional para avanzar en la individualización de las características biológicas de cada varón e identificar cuál es el mejor tratamiento. De esta forma, se espera la publicación de los primeros resultados en el segundo semestre del año.
Tal y como han puesto de manifiesto los expertos reunidos en el encuentro, al igual que ocurre con la enfermedad en la mujer, el cáncer de mama masculino es una entidad heterogénea, por lo que su investigación y abordaje se debe plantear “de forma individualizada” a partir de la biología del tumor de cada paciente.
De hecho, Martínez aseguró que se ha extrapolado todo el conocimiento del cáncer de mama de la mujer al del hombre, si bien “ya se ha visto que hay diferencias que se deben tratar”. “Con este registro, tratamos de personalizar y ver las diferencias del genotipo y fenotipo, las diferencias germinales”.