Ocho de cada diez mujeres se sienten en desigualdad a la hora de ejercer su derecho a una menstruación digna, de acuerdo con la colectiva Menstruación Digna.
Por lo tanto, colectivos, legisladoras y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se reunieron para impulsar una iniciativa de ley que garantice el derecho de las mujeres y personas menstruantes a tener una menstruación digna.
Según Menstruación Digna, el 30% de las niñas dejan de ir a la escuela cuando están menstruando y 21% de las mujeres dejan de trabajar, además, 54% deja de comprar medicamentos por falta de dinero.
Las reformas legislativas buscan asegurar a las mujeres y personas menstruantes insumos de higiene y un paso más “en el goce y disfrute de los derechos a la salud sexual y reproductiva de las mujeres”.
La presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, dijo que una de las metas institucionales de la presente administración de la Comisión es que se reconozca y garantice este derecho a la salud.
Aunado, recordó que la CNDH emitió una recomendación para visibilizar las condiciones desfavorables en las que las mujeres privadas de libertad ejercen su derecho a la menstruación.
De acuerdo con Piedra Ibarra, estas mujeres carecen de insumos de higiene personal, espacios adecuados y agua potable. Esto las empuja a usar otros utensilios como calcetines y telas.
La legisladora Alejandra Méndez señaló que existen estigmas hacia la menstruación que tienen una carga social muy grande.
De acuerdo con los colectivos y legisladoras el impulso de esta serie de legislaciones a favor de una menstruación digna, marca un parteaguas en la Ciudad de México y el resto del país.