La Comisión de Venecia del Consejo Europeo advirtió que la reforma en materia electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador vulnera al Instituto Nacional Electoral (INE), su imparcialidad y podría tener serías consecuencias para la representatividad debido a la reducción de diputados y senadores.
En respuesta a una solicitud del consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, quien el pasado 28 de junio pidió a la Comisión de Venecia una opinión sobre el proyecto de reformas constitucionales relativas al sistema electoral de México, el organismo del Consejo Europeo señaló que no garantiza la independencia del Instituto, así como la imparcialidad de los jueces que lleguen al Tribunal Electoral.
“Esta reforma, si se aprueba, cambiará radicalmente el sistema electoral en México y la gestión de su proceso electoral. Anteriormente, todas las reformas electorales constitucionales habían sido propuestas por la oposición. Esta es la primera vez que el Presidente cuyos partidarios políticos tienen la mayoría en el Congreso inicia cambios constitucionales tan ambiciosos que afectarán significativamente las próximas elecciones que tendrán lugar en 2024”, advirtió.
Según las conclusiones de la Comisión Europea para la Democracia a través de la Comisión Venecia, integrada por expertos independientes de 61 países, México debe desechar la idea de un instituto centralizado, pues atenta contra la imparcialidad, ya que sería facultad de los funcionarios electos determinar a los magistrados del tribunal electoral.
“La Comisión de Venecia señala de entrada que el procedimiento propuesto, según el cual el INEC se encargará de las elecciones de sus propios miembros, es inusual y crea riesgos para su condición de organismo imparcial”, se lee en el documento.
El organismo señala que los miembros del órgano que remplazaría al INE, el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas, no deberían ser elegidos mediante el voto directo, como propone el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues el sufragio tendría una intencionalidad política implícita, lo que guiaría la actuación de los funcionarios.
La Comisión de Venecia apuntó que el procedimiento mediante el cual se propone modificar para la elección de consejeros y jueces tiene que ser reconsiderado, pues no cumple con los estándares internaciones y las buenas prácticas en materia electoral respecto a una representación equilibrada de fuerzas políticas, además de que deben ser imparciales y no hacer campaña.
“Cambiar un sistema que funciona bien en general y goza de la confianza de diferentes actores electorales y años de evolución democrática conlleva un riesgo inherente de socavar dicha confianza”, señaló.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador criticó la posición del Consejo de Venecia y recordó que en las disputadas elecciones de 2006 en las cuales acusó fraude el organismo ni siquiera se pronunció.
“Qué bueno que opinen los europeos para que tomen en cuenta el debate los legisladores, pero cuando nos hicieron fraude a nosotros, cuando se robaron la Presidencia, esos europeos callaron como momias, nunca dijeron nada. Sin embargo tienen todo el derecho de expresarse, de manifestarse”, dijo.
López Obrador celebró que la iniciativa comience a discutirse esta semana en la Cámara de Diputados y llamó a escuchar todas las voces, incluida la del ex presidente Felipe Calderón, quien el pasado fin de semana en el foro “20 años de FIL: Democracia y Libertad” dijo que la democracia en México está en riesgo.
“Tengo entendido que ya se va a discutir en el Congreso, que ya va a entrar a debate lo de la reforma electoral. Que los legisladores tomen en cuenta todas las opiniones, hasta la de Calderón”, ironizó el presidente.
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