CIUDAD DE MÉXICO (apro).– OXXO, la cadena de tiendas de formato pequeño, abrió las puertas de su primer establecimiento Grab & Go, que consiste en que los clientes elijan sus productos físicamente y al salir de la tienda se cobren automáticamente vía un código QR previamente registrado.
La peculiar tienda, la primera en su tipo en Latinoamérica, ya opera en las instalaciones del Tecnológico de Monterrey de la capital neoleonesa.
La tienda está equipada con cámaras de última generación que identifican al cliente y los productos que toma para comprar. El recibo se podrá obtener en el teléfono celular mediante la aplicación móvil OXXO SMART TEC GRAB & GO. Los datos quedarán guardados en la aplicación para futuras visitas.
“Con esta primera tienda refrendamos nuestro compromiso con la innovación tecnológica y la satisfacción de nuestros clientes vía el mejoramiento en la experiencia de compra”, dijo el director de Transformación y Planeación Estratégica de la cadena, Ricardo Leyva.
“Por medio de Grab & Go buscamos ofrecer una experiencia de compra única, impulsada por tecnología que es replicable y reubicable en universidades, plazas y parques”, añadió.
La directora de Canal Tradicional de OXXO, Lucy González, explicó que este método innovador es un concepto que busca ofrecer productos y servicios en formatos personalizables, para atender mercados específicos, como complejos departamentales, hospitales y oficinas.
“Con esta propuesta queremos cumplir nuestra misión de simplificar la vida de nuestros clientes y colaboradores, creando experiencias memorables”, afirmó.
Para hacer uso de la tienda por primera vez, los clientes deberán: descargar e instalar la aplicación OXXO SMART TEC GRAB & GO, registrar sus datos, agregar una tarjeta de crédito o débito, esperar a que se genere un código QR y escanear el código QR al ingresar a la tienda.
OXXO es la primera cadena de tiendas de formato pequeño, que en 30 años de experiencia tiene tiendas en México y Colombia; forma parte de Fomento Económico Mexicano (Femsa), creada en 1890, que participa en la industria de bebidas con Coca-Cola Femsa, y es el segundo accionista de la cerveza Heineken.
