Nunca vienen mal los divertidos relatos de Woody Allen. Su nuevo libro Gravedad cero, es un bálsamo para épocas oscuras o simplemente para buscar unas buenas carcajadas. La publicación de Cuentos reunidos, de Adela Fernández es un justo homenaje para una autora versada para lo fantástico e injustamente olvidada. ¿Dónde estaba Nara Vidal? ¿Por qué no habíamos leído a la autora brasileña? Menos mal que llega Suerte, una novela poderosa y estrujante. Cerramos las recomendaciones con En honor a Eros, una profusa investigación de Alberto Davidoff Misrachi sobre la relación que tiene el sexo con el alma humana.
Woody Allen. Gravedad cero. Alianza. Trad. Eduardo Hojman. 256 pp.
Nueva colección de relatos de Woody Allen, diecinueve narraciones inéditas escritas con un humor a prueba de escépticos y una inimitable habilidad para mezclar la cultura popular con su habitual pedantería. Con la ciudad de Nueva York como escenario de sus enredos, ya escriba sobre caballos que pintan, autos que piensan, la vida sexual de las celebridades, los inconvenientes de asistir con tu pareja a una orgía o la injusticia de reencarnarse en langosta, el humor de Woody Allen siempre es original y transgresor, popular y sofisticado al mismo tiempo, políticamente incorrecto e implacablemente divertido.
Adela Fernández. Cuentos reunidos. Fondo de Cultura Económica. 155 pp.
Entre lo onírico, lo fantástico y lo siniestro, los cuentos de Adela Fernández oscilan dando voz a fantasmas, a seres que se metamorfosean o se duplican, a personajes rechazados, sometidos o maniáticos. En Cuentos reunidos, volumen conformado por los libros Duermevelas (1986) y Vago espinazo de la noche (1996) y prologado por Jazmín G. Tapia Vázquez, los límites de la realidad, la exploración de la muerte y la crueldad humanas, acentúan el paradójico juego de encubrimiento que la autora otorga a la falta de comunicación, la soledad, el abandono y el desamor que surgen de manera destructiva donde lo familiar se enturbia y llega a finales trágicos.
Nara Vidal. Suerte. Textofilia. Trad. Nicolás Barbosa. 107 pp.
La autora brasileña reconstruye una migración individual, femenina y colectiva, que nos revela de qué forma todo exilio es el arribo a un puerto interior. A medida que Margareth emigra redondeado el mundo, desandamos la senda de su vientre igualmente redondeado, el camino torcido de su fe y la ruta cíclica de la crueldad humana. Suerte es una rueda que nos aplasta y nos conduce por un hiato por el trecho fecundo que hay entre la gesta, la gestación y la tragedia.
Alberto Davidoff Misrachi. En honor a Eros. Turner. 464 pp.
Obra que explora cómo lo sexual se inserta en la brecha entre materia y alma, entre alma y espíritu. Pone al cuerpo en el centro de la experiencia espiritual, no como fin último o identidad que debamos buscar, sino como un crisol que se transforma y permite alcanzar una mayor profundidad. Este secreto a voces nos sirve de guía para revisar la comprensión de algunas de las obras decisivas de nuestra civilización. Como en el amor, la misteriosa belleza de estos iconos culturales puede resultar el lenguaje preciso y precioso de un habitar la intimidad.