CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El peso continúa con paso perfecto en lo que va del 2023. Este miércoles, la moneda mexicana se apreció 0.13% frente al dólar, que se ofertó en 19.38 unidades, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
Lo anterior fue resultado del debilitamiento del dólar estadunidense frente a sus principales cruces, con el índice ponderado perdiendo 0.36%, ante una ola de optimismo en los mercados de capitales, principalmente durante las sesiones asiática y europea, explicó el análisis del Banco Base.
“Cabe recordar que en China el gobierno se comprometió a nuevas medidas de apoyo para el sector inmobiliario, mientras que en Europa la inflación de Suiza y Francia se ubicó por debajo de lo esperado en diciembre, enviando la señal de que las presiones inflacionarias seguirán moderándose, permitiendo una menor especulación sobre la necesidad de incrementos a la tasa de interés de los principales bancos centrales”, señaló.
Por su parte, en Estados Unidos se destacó la publicación de las minutas de política monetaria correspondientes al anuncio del 14 de diciembre.
Al interior de la Reserva Federal reconoce que existe una alta probabilidad de recesión económica en 2023, mientras que los miembros del Comité reconocen que la inflación ha bajado en meses recientes.
Sin embargo, los miembros consideran que el mercado laboral sigue fuerte, que la inflación persiste en niveles inaceptablemente elevados y que se mantiene el riesgo de un desanclaje de expectativas de inflación, por lo que reiteraron que es necesario mantener una postura monetaria restrictiva hasta que se logre una trayectoria sostenida de la inflación hacia el 2 por ciento.
Las divisas más apreciadas este miércoles fueron: el dólar australiano con 1.65%, el florín húngaro con 1.53%, el dólar canadiense con 1.40%, la corona checa con 0.92% y el zloty polaco con 0.82%. En contraste, las más depreciadas: el yen japonés con 1.24%, el peso colombiano con 0.68%, el sol peruano con 0.30% y el rublo ruso con 0.21 por ciento.
Aunque el peso arrancó con el pie derecho, el análisis del Banco Base previó que para el mediano plazo se esperan depreciaciones moderadas del peso, dada la desaceleración económica en Estados Unidos y la expectativa de menor crecimiento en exportaciones y remesas.