El extenista alemán Boris Becker acudió hoy a la Berlinale, dos meses después de salir de una cárcel del Reino Unido, a presentar un documental centrado en sus logros deportivos y convencido de que, pese a sus errores, está a tiempo de convertirse “en una mejor persona”.
“Fueron ocho meses y seis días en una cárcel en los que cada mañana te preguntabas cómo será el resto de tu vida”, explicó el tres veces campeón de Wimbledon, rodeado del director del filme “Boom! Boom! The World vr. Boris Becker“, Alex Gibney.
El filme arranca con una entrevista grabada pocos días antes de escuchar sentencia. Habla a cámara con el rostro abotargado y al borde del llanto, a modo de premonición de la condena a dos años y medio que se le impuso por irregularidades financieras.
Sus delitos fiscales se cifraban en unos 2.7 millones de euros. La sentencia seguía a una cadena de problemas financieros, una declaración de insolvencia de 2017, una deuda por casi 60 millones de euros y un préstamo pendiente de liquidación por 3.5 millones de euros por una villa de su propiedad en Mallorca.
A la entrevista sigue la imagen de un enjambre de cámaras captando la llegada a un tribunal londinense de Boris Becker, elegantemente trajeado y de la mano de su pareja actual, Lilian De Carvalho Monteiro. Tras escuchar sentencia ingresó directamente en la cárcel londinense de Wandsworth.
“Ahora estoy aquí sentado, me siento bien. Me he marcado el propósito de ser mejor persona. La esperanza es lo último que se pierde”, afirmó el ex tenista, unas horas antes del estreno oficial de su filme.
Gibney, ganador de un Oscar en 2008 por “Taxi to the Dark Side”, compone su película con dos entrevistas a Becker -la de 2022 y una anterior de 2019-, imágenes de sus partidos más legendarios y entrevistas con otros astros retirados, como John McEnroe, Mats Wilander o Bjorn Borg.
De las imágenes del adolescente alemán que ganó su primer Wimbledon con 17 años se pasa a tratar de explicar sus fortalezas y debilidades: “La vida de una máquina de ganar en tenis es mucho más dura de lo que se imaginan”, aseguró Becker.
Barbara Feltus, la actriz con quien estuvo casado entre 1993 y 2001 y con quien tuvo dos hijos, Noah y Elias, es la única entre las exmujeres de su vida que aparece entre los entrevistados.
El divorcio de ésta sucedió a la relación con la modelo Angela Ermakova, con la que tuvo un encuentro sexual en el cuarto de las escobas de un hotel de lujo londinense, fruto del cual nació su hija Anna.
Empezó ahí una cadena de indemnizaciones millonarias, alternadas con intentos de recomponer su vida y nuevos escándalos, que en el filme de Gipsey se reflejan a través de portadas de tabloides.
“Lo último que pretendo es ganarme la compasión. Soy consciente de mis errores”, afirmó Becker, más sereno que en las primeras entrevistas difundidas en Alemania tras salir de la cárcel por medios como el diario sensacionalista alemán “Bild”.
El documental sobre Becker se exhibe en la sección Berlinale Special, donde asimismo se estrenará “Love to love you, Donna Summer”, dirigido por Roger Ross Williams y que recoge material inédito de la que fue reina del pop.
En los primeros días del festival se estrenó ya “Joan Baez I A Noise”, de Karen O’Connor y Maeve O’Boyle, que recoge la última gira de la cantante estadounidense, en 2018, además de material de archivo y imágenes familiares.
La legendaria cantante no solo acudió al estreno. También tarareó una canción en la ronda de preguntas tras la proyección del documental, en medio de fuertes ovaciones de los presentes.