Por tercer año consecutivo, quince editoriales —de cinco estados de México— obsequian un libro de bolsillo para celebrar el Día Internacional Libro.
Ruina circular recopila textos de voces nacionales e internacionales, la mayoría escritos por mujeres. Los ejemplares se entregarán en veintiuna librerías independientes del país y a través de los sitios web de las editoriales participantes.
La primera edición de este proyecto surgió en 2021, durante los meses más aciagos de la pandemia: nueve editoriales del país se unieron para publicar un libro de bolsillo con escritos de su catálogo, que se regaló el Día del Libro. “La antología, titulada Superficie celeste y otros escritos, se agotó en una semana. Tras el éxito del proyecto, en 2022 decidieron publicar el siguiente volumen: Placeres mínimos, al que se sumaron más editoriales. La segunda antología también tuvo un buen recibimiento entre los lectores, quienes compartieron fotos de sus ejemplares en redes sociales”, explica el sello Gris Tormenta a través de un comunicado.
Este 2023 se tiene lista la tercera edición, ahora bajo el título Ruina circular, incluye quince textos, propuestos por las casas: Alacraña, Editorial Almadía, Ediciones Antílope, Aquelarre Ediciones, Canta Mares, Dharma Books + Publishing, Elefanta Editorial, Festina Publicaciones, Grano de Sal, Gris Tormenta, Impronta Casa Editora, Minerva Editorial, Pitzilein Books, Polilla Editorial y Zopilote Rey. Las editoriales seleccionaron capítulos o fragmentos de alguno de sus libros a partir del tema elegido para esta ocasión: el regreso. Algunos son adelantos de libros que saldrán este año.
Ruina circular cuenta con textos de Edith Boissonnas, Georgina Cebey, Mildred Clingerman, Leonor García Millé, Margarita García Robayo, Natalio Gente, Pedro Juan Gutiérrez, Valeria Mata, Emiliano Monge, Yara Nakahanda Monteiro, Mary W. Shelley, Sini Silveri, Karina Sosa Castañeda y Al Worden; además de un prólogo del periodista Carlos Priego.
Para Jacobo Zanella, editor de Gris Tormenta este tipo de colectividades reúne a los distintos personajes de un gremio fragmentado y a veces distante. “Esta cercanía es necesaria, antes que en lo material, en lo moral, por decirlo de alguna manera. Vistas desde arriba, todas las editoriales de un país unidas son como una gran editorial que busca algo: su tiempo. Y vistas desde más arriba, todas las editoriales de una misma lengua la están redefiniendo generacionalmente, están marcando el pensamiento de una época. Este libro es un ejemplo, quizá minúsculo, de la importancia de esa colectividad”.
Isabel Zapata, editora de Antílope apunta que los proyectos editoriales colectivos son “los más gozosos, los más estimulantes, los que mejor representan el espíritu de hacer libros: la colaboración y el diálogo. Trabajar con otras editoriales nos presenta puntos de vista que refrescan nuestro entendimiento y lo enriquecen. La edición se opone al aislamiento, y creo firmemente que en los libros colectivos palpita el espíritu de ese compañerismo”.